Hoy...*

Hoy...

Es un día especial. 

Salgo a la calle.. 

No he quedado,
no tengo reloj,
ni tengo teléfono
para contactar.. 

Soy libre. 

Hoy... 

Caminaré adonde las suelas de mis nike me lleven.. 

Y sin rumbo llegaré
adonde el destino quiera y desee.. 

Porque como soy libre...:

No me afecta la suerte.

La gente me mira al pasar,
mientras suena una dulce melodía de jazz
que inunda la mente de los caminantes
que sin camino se hacen camino al andar... 

Empieza a llover.. 

Y entre la marabunda de la gente
se forma el orden del Chaos.

Se llenan los portales a velocidades vertiginosas... 

Como si éste agua caído del cielo fuera ácido.. 

O veneno...

Pero no lo es, 

sin duda.

Levanto la cara hacia el cielo,
y al caminar con las manos en los bolsillos,
las gotas que caen incesablemente sobre mi cara
resbalan hasta llegar a mi cuello
y siento una gran sensación de tranquilidad... 

El pelo mojado se desordena.

Y consiguientemente, esclavo de mis complejos
 busco mi reflejo en los escaparates mojados.

Me paro frente a uno de ellos.
 Y la gente que tan desesperadamente
se ha ido replegando en éste,
me hace un pequeño hueco...

Se reflejan mis ojos en el cristal traslúcido... 

Y me doy cuenta de la inmensa tristeza que llevan consigo.

Sin querer, ni poder evitarlo,
una lágrima asoma por cada uno de mis ojos
y lentamente se desliza por mi faz...

Y se confunde con las gotas de lluvia... 

Me paso los dedos por los ojos... 

Y recuerdo cosas que no quiero.. 

Saliendo del escaparate sigue lloviendo mucho
y el gentío extrañado me mira.. 

No soy inútil, ni estoy enfermo.. 

Sólo me gusta caminar bajo la lluvia,
en pleno invierno...

Quizás locura...

Quizás no tanto...

Pero es la única manera que sin saber cómo,
dónde o cuándo poco a poco,

todos mis problemas voy superando. 

Camino. 

Y ya estoy empapado... 

Siento el frío que sobre mi cuerpo se ciñe 

y así me ataca por todos lados...

Cualquier punto de mi cuerpo
se ha convertido en blanco...: 

De este frío helado. 

Pero me da igual. 

Seguro que no puedo

llegar a sentirme tan mal

como me siento ahora.. 

Que me siento ya...: Fatal. 

Llego, caminando, a un lugar tranquilo...

Dónde con paz y sigilo

me siento sobre el tronco
de un árbol caído..

Y así mismo me apoyo sobre el tronco de otro que,
no como este último, ha resistido. 

Agudizo el oído.. 

Oigo serenatas de pájaros cantores

y sonidos no identificados...

Que me hacen dudar de si estoy sólo.. 

Es fantástica ésta vista: 

árboles y campo mientras

baja el sol tranquilamente... 

Para dar lugar a nuestra esperada luna,

con carita de media sonrisa.. 

Y he ahí la Luna,
es muy buena compañera. 

Quizás tu estás ahí,
dulce Luna,
para advertirme
de algún contratiempo...:

Como si un ángel de la guarda fueses.. 

Me despierto y todo era un sueño.. 

Hoy.. 

Será un día especial.

Mazzu Saintz.*