Aunque te cueste, debes levantar cabeza.
En la vida todo pasa por alguna razón y
lo más probable es que no entiendas qué
razón es tan valiosa para a veces quitarte
cosas que valoras muchísimo o cosas que
crees que sin las cuáles no vas a poder
seguir adelante, pero, sorprendentemente
lo más probable es que no entiendas qué
razón es tan valiosa para a veces quitarte
cosas que valoras muchísimo o cosas que
crees que sin las cuáles no vas a poder
seguir adelante, pero, sorprendentemente
nace una valentía extrema en ti y puedes
aceptar el dolor, superarlo y recuperarte.
Ocurra lo que ocurra necesitas ser feliz,
ya no por los que están a tu alrededor
ni por no hacer sufrir ni aburrir a nadie
con tu desdicha, sino para hacerte a ti
mismo el favor de darte la oportunidad
de seguir sonriendo mientras llueve...
Después de la tormenta hay un pequeño
lapso de tiempo desde que dejan de caer
relámpagos y la lluvia se cansa de caer,
hasta que el cielo se despeja y puedes
ver ése azul tan bonito y sentir el calor
y la luz del Sol en tu cara, haciéndote
sonreír sin motivo aparente, sólo porque
te apetece, sólo porque sí y punto.
Ése tiempo entre la tristeza y la felicidad
absolutas, es el período en el que te debes
de embriagar de optimismo y felicidad...
Intentar sonreír porque lo mereces, y ser
feliz porque tanto a tu corazón como a
tu mente les sienta de maravilla la alegría.
Por hoy, nada de tristezas, hoy sólo debes
encontrar ánimos en las pequeñas cosas
que te rodean, rodearte de buena gente
y querer a todo aquél que te quiera...
Mazzu Saintz.*