No puedo decir qué siento por ti,
porque tengo miedo
que no sientas por mi,
lo que yo por ti siento...
porque tengo miedo
que no sientas por mi,
lo que yo por ti siento...
Es así de fácil y complicado,
ésto de estar enamorado...
Y tener miedo a ser rechazado,
a no poder tenerte a mi lado.
Todo va bien contigo,
si no dices que no puedes más...
Intento entender y no consigo,
lo que yo necesito no me das...
Necesito que te alejes,
Déjame tranquilo,
Que te vayas, me dejes...
Seguiré mi destino...
He estado dónde estoy,
y a día de hoy...
Puedo decir claramente,
"quién funciona es mi mente..."
Porque mi corazón ya no siente,
se fué volviendo cada vez más duro...
Desilusión tras desilusión...
Lo que tengo seguro,
es que no hay razón,
Para seguir en un mundo,
Sin ti...
Estoy rotundo absoluto,
No podré seguir así...
Ya ni caen las lágrimas por mi cara,
ni lloro cuándo quiero llorar...
Se acabó sufrir, mi corazón se para,
para no sentir dolor, para pensar...
No lloro por nada...
No puedo llorar...
No porque no quiera...
Sufro horrores por dentro, otra vez.
Con causas que nadie sabe...
Ni nadie sabrá nunca...
Sólo en mi mente cabe...
Éste rompecabezas que me desnuca...
Me tiene en la duda,
Entre la vida y la muerte...
Entre el viaje sin fin,
Y la vida, la suerte...
Tirar los dados trucados,
Jugar a la ruleta rusa,
Atracar a ladrones armados...
Dudar de una duda...
Creer en la suerte,
Tener superstición,
Creer que la muerte,
Es una solución.
Producto de la más pura y dura...:
Desesperación.
Mazzu Saintz.*